UNA BUENA AMANTE

He llegado a la conclusión: sólo hay una cualidad en una mujer que un hombre buscaría para su futura esposa y que no encontraría en su madre: ¡¡Qué fuese buena amante!!

Hace una semana le comunicaron a mi esposo mantecoso que tiene que ir a cubrir una baja a otra ciudad. Será durante un periodo no superior a dos meses pero tendrá que hacerse la maleta e instalarse en una casa, cortesía de la empresa. Hasta ahí puede parecer todo razonable y normal pero entra el factor ¡¡mamá!!

Mamá me haría esto, mamá me haría esto otro, mamá me mandaría la comida de toda la semana....(ahora comprendo el término: ¡qué te aguante tu p--- madre!)

Y es que, como era de esperar, han empezado las discusiones: Se ve que no puede ser autónomo, (no meto a todos en el mismo saco, que conste. De momento sólo a este y a mis otros cinco novios anteriores) , que lo de estar días sólo sin gente que le cocine le aterra y que pretende llevar todo lavado, planchado, cocinado y envasado a su nueva vivienda (las cervezas si llegan frías, mejor), como le haría su mamá.

También me ha dejado caer, como que no quiere la cosa, una visita guiada por su nueva vivienda. El plan no estaba mal, un fin de semana en una ciudad nueva, de turismo (Ja)...me mosqueé cuando a la hora de coger la chaqueta agarró también, (así, como el que agarra el paraguas cuando se echa a llover) la lejía, el estropajo, el limpiacristales, el KH7, el cubo, la fregona...etc. A él se le puso cara de Don Limpio y a mi de una mala ostia...

Estos productos le han echo un sitio en la cocina y le han invitado a dormir en el sofá estos días... 

Yo, mientras tanto, me he quedado sin visita guiada y sigo tirando tapperwares, ese infernal producto que se inventó para ensalzar a las madres.